martes, 26 de febrero de 2013

Software libre y derechos de autor

¡Saludos!

  Hoy voy a hablaros un poco sobre el Software libre y el Software privado, conceptos que vimos en las últimas sesiones de "Medios, Materiales y TIC's para la enseñanza".

Fuente: Wikipedia
  En clase se nos resumió un poco la historia del nacimiento del Software, que es todo lo referente a programación en un ordenador, es decir, los programas que le hacen funcionar. Como conceptos importantes, la diferencia entre software libre y software privado. El primero permite a cualquier usuario con los conocimientos suficientes modificar y usar la base del programa a su gusto. Sin embargo, el software privado no permite el acceso al código fuente del programa, lo que significa que no permite modificaciones. Entre los sistemas operativos libres más comunes se encuentra Linux, en el que se basan muchos de los sistemas educativos actuales (como el que utiliza para sus ordenadores la Universidad de Murcia).

  La polémica la encontramos entre los defensores del Software libre y las empresas privadas que se benefician de la venta de programas informáticos que no permiten acceso al código fuente. Una figura que no conocía era la de Richard Stallman, creador de los primeros movimientos a favor del software libre y del concepto "copyleft", que considera importante la difusión de las creaciones e ideas de manera libre. Por otro lado, Raymond, otro personaje desconocido para mí, defiende que el Software libre no es software gratis y que se pueden obtener beneficios de la creación de software libre, lo que lo hace más rentable. Aparece el concepto "open source" que se refiere al software abierto, código abierto o recurso abierto, que matiza esta posibilidad de negocio, aún siendo el software manipulable por cualquier usuario.

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  Todos estos nuevos conceptos y tendencias que están hoy en día en continua evolución, me hacen darme cuenta de la velocidad a la que cambia la sociedad de la información y la comunicación. Las creaciones, ideas y obras pasan, gracias a Internet, a poder ser difundidas a cualquier parte del mundo de manera casi inmediata. Esto conlleva, por otro lado, un conflicto referente a la protección de los derechos de autor. Numerosas iniciativas defienden la necesidad de controlar los intercambios por Internet que puedan violar los derechos de autor de obras, películas, libros, etc. Sin embargo, se me antoja casi imposible llevar a cabo este tipo de control, además de que este tipo de leyes pueden incurrir en la violación de la libertad de expresión. ¿Dónde está el límite? ¿Qué es preferible defender?

  En mi opinión, instituciones y ciertos autores se empeñan en restringir el uso de datos en la red, lo cual es un enfoque equivocado. La sociedad avanza a pasos agigantados, y esta velocidad aumenta día a día. Lo que nos diferencia como seres humanos es la capacidad de adaptación y, a veces, nos cuesta ponerla en práctica. Enfocando el cambio desde la adaptación, se llegaría seguramente a una solución más justa y en consonancia con el progreso de la sociedad.

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  Desde esta perspectiva, un autor debe encontrar en Internet un aliado, no un enemigo, pues Internet forma parte de la realidad de nuestro mundo actual. Debemos inventar nuevas formas de beneficio, nuevas maneras de negocio a través del arte, conforme a las nuevas normas sociales. Numerosos artistas ya se han beneficiado de la red para darse a conocer, para difundir su obra o, incluso, usando las propias herramientas de Internet para nuevas maneras de arte y creación. No debemos oponernos al progreso, si no adaptarnos a él.


  Con esta última reflexión, me despido hasta el próximo post.


Laura.

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